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Entre las diversas historias encontramos la montaña que llora más conocida como punta jacha o loma de terrón, se cuenta que hace muchos años vivía en la parte más alta de esta montaña una joven, que se enamoró perdida mente de un joven de otra parroquia cercana a la suya, pero sus familias no se llevaban así que prohibieron rotundamente este amorío pero lo que no esperaban era que entre sus andanzas ella quedaría embarazada, su amor era tan grande que querían luchar en contra de todos los que se opusieran a verlos juntos, pero esto no pudo ser ya que la familia del joven lo mandó muy lejos para que no regresara. Nadie supo a qué lugar su familia lo llevó. Por otra parte la familia de la joven la abandonó a la buena de Dios.

Transcurrieron 8 meses, y en la noche de un día de luna llena y sin que tuviera quien la auxilie empezó con los labores de parto. Con  sufrimiento y dolor dio a luz a un bello niño; pero ya sin fuerzas no aguantó y murió a los pocos minutos. Las horas pasaron y se escuchó tan fuerte los lloriqueos de la criatura hambrienta que despertó a todos los del pueblo. Así se reunieron algunas personas y pensaban que algo terrible había pasado con aquella joven, pero era bastante tarde todo estaba muy oscuro que no se arriesgaron a subir a la montaña.

 

Sin auxilio pronto el bebé hambriento falleció junto a su madre. Desde ese día los moradores del sector escuchan a media noche en días de luna llena los lamentos de un niño, que llora desconsolado por el amor de sus padres siempre que sus moradores escuchan los lloros desde la montaña elevan una plegaria al cielo velando por la pobres almas de esta madre y su hijo para que puedan descansar en paz.

Fuente: Sofía Loza

LA MONTAÑA QUE LLORA

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